VENCIENDO ADVERSIDADES (RESUMEN)

Por: María Rosario Carrasco Patzi

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Esta novela se basa en acontecimientos reales que se desarrollaron entre los años 1992 y 2018 en la ciudad de La Paz, sede de gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia en donde se relatan las dificultades en la vida de Carlos que tiene “Parálisis Cerebral” y que le afecta: la psicomotricidad fina (movilidad de los dedos de las manos), la psicomotricidad gruesa (postura corporal y desplazamiento), lenguaje verbal (no articula bien las palabras), estrabismo visual (visión doble) discapacidad intelectual hasta un grado de 56% (calificación de CODEPEDIS) y su difícil relación con la sociedad en búsqueda de autonomía, mediante la superación personal.
Es importante compartir esta historia inspiradora, no solamente con otros padres de niños con discapacidades, sino también con los maestros, médicos, legisladores y población en general porque si logran el apoyo que necesitan de toda la sociedad y nos preocupamos por escucharles pueden llevar vidas mejores.
Muchas veces se piensa que las personas con discapacidad no pueden tener aspiraciones o sueños, sin embargo, esta historia nos demuestra, cómo la discapacidad se puede convertir en un motor de lucha y superación personal por acceder a un nivel máximo en los estudios. En este sentido, Carlos aprendió a leer y escribir con la ayuda de su madre al haber sido rechazado en varias escuelas de educación regular, pero cuando ya tenía 15 años se inscribió a un Centro de Educación Alternativa, de la que después de cursar y aprobar todas las materias con éxito, egresó Bachiller el año 2008, después ingresó a una Carrera de una universidad pública aprobando el prefacultativo, acompañado de su madre con la cual logró unir lazos de amor y amistad muy fuertes, de este modo, accedió a la educación universitaria en la carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA).
Así pues, fue superando la discriminación e incomprensión de una sociedad injusta hacia estas personas y en la que algunos como Carlos, no se conforman con la realidad en la que viven, sino que intentan cambiarla, con el apoyo de Dios y de su familia. Al respecto, él dice: “de nada sirve el apoyo de la familia y de los amigos, si uno mismo no quiere o no puede hacer nada, entonces, esa fuerza de voluntad debe surgir de nosotros mismos”…
La moraleja a la que nos puede llevar esta historia, es la de enseñarnos que “nunca debemos conformarnos con la realidad que nos muestran los pesimistas y siempre hay que intentar cambiarla superando nuestras limitaciones, gracias a esa actitud positiva, evoluciona la sociedad”.

CUANDO UNA PUERTA SE CIERRA OTRAS SE ABREN. 

Carlos siendo aún niño tuvo que sufrir el rechazo de algunos profesionales en establecimientos educativos porque no sabían cómo tratar su problema y no se encontraban capacitados para poder enseñarle, e incluso una persona se atrevió a decir “que él nunca aprendería a leer ni escribir y peor a realizar operaciones aritméticas”.

De esa manera, es inscrito en un Centro de Educación Especial en la ciudad de El Alto: CEREFE (en ese tiempo toda la familia vivía en ese lugar) y a Carlos le gustaba asistir a esa institución en donde se comunicaba con sus maestros que le entendían y con sus compañeritos con los cuales se sentía a gusto porque no le observaban como “bicho raro” y tampoco se le burlaban. Pasaron los años y cuando tenía 9 años de edad, el director de ese Centro sugirió a los padres que debían inscribirlo en un establecimiento educativo del sistema regular porque según él,  "era muy importante su integración educativa con otras personas de la comunidad".

Los padres de Carlitos en un principio se negaron debido a las malas experiencias que habían sufrido en los establecimientos educativos tanto fiscales como particulares, anteriormente. Sin embargo, el director del Centro insistió y casi les obligó a que debían hacerlo por el bien del niño. Así lo hicieron, aunque a regañadientes, lo inscribieron en una escuela fiscal del sistema regular en donde desde el principio lo cambiaban de un paralelo a otro (como si los profesores se estuvieran pasando la pelotita que no era de su agrado). Al mismo tiempo, también tuvo que sufrir el rechazo de sus compañeritos de la escuela que se burlaban y se reían, debido a sus  movimientos inestables  y por su baja visión, ellos le apodaron “el borrachito”, “el cieguito” y otros calificativos. Para el colmo, la actitud de Carlos hacia la escuela había cambiado y cada que tenía que ir a clases lloraba mucho y se negaba a asistir (esto no le había sucedido antes, cuando asistía al Centro de Educación Especial). Su madre, además notó que estaba siendo afectada su autoestima, porque de ser un niño alegre, con la sonrisa a flor de labios y extrovertido se había convertido en un niño triste, retraído, introvertido e iba encerrándose en su mundo, sin querer comunicarse (síntomas de autismo).

Por estos motivos, sus padres deciden retirarlo de la escuela y su madre se convierte en su maestra, dándole clases mediante un programa que elabora y adapta a las necesidades de aprendizaje del niño, con un horario establecido que incluye un descanso o recreo.  Así, transcurren los años y Carlos aprende a leer, escribir y también a realizar operaciones aritméticas, sin dejar de lado sus terapias de Fonoaudiología y Fisioterapia a las que asiste a un Centro de Rehabilitación (entonces es cuando se crea un fuerte lazo de amor filial y amistad entre madre e hijo)

Cuando Carlos tenía 13 años de edad, su madre observó que le gustaba la computación e interaccionar con la máquina, entonces pensó que era necesaria su asistencia a un instituto en donde le enseñen el manejo de paquetes computacionales. De ese modo, empieza a asistir a uno cercano a su domicilio. Sin embargo, no le va bien, porque la enseñanza no era personalizada y el instructor se abocaba a dar sus clases sin interesarle que aprenda o no. Entonces su madre ve por conveniente asistir con él para que aprendan juntos los diferentes paquetes que ella también los desconocía.

Ambos se colaboraban y juntos aprenden todos los paquetes e incluso Carlitos supera a su madre (El aprendiz se convierte en instructor). Después de un año recibe su título de "Técnico en Aplicaciones Computacionales"  y no conforme, decide seguir superándose , para ello toma un curso de Diseño Gráfico y como ya tenía las bases, logra aprender Photoshop y otros programas. Le gustaba estar en su computadora aprendiendo todo lo que fuese posible.

Cuando cumple 15 años, sus padres le preguntan ¿desearías obtener el título de bachiller? y él contesta con un "sí" rotundo. Entonces le inscriben a un Centro de Educación de Adultos en donde empieza desde primaria hasta el nivel superior, transcurren los años y culmina sus estudios con éxito,  obteniendo como premio a su esfuerzo de asistir todas las noches ya sea en frío, lluvia o nevada, su ansiado título de Bachiller. Cabe destacar que sus docentes y compañeros lo estimaban mucho y a él le gustaba asistir a ese Centro de Educación Alternativa de Adultos.

Cuando transcurría el año 2009, Carlos leyó en el periódico una convocatoria para realizar el CURSO PREFACULTATIVO  en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la información en la Universidad Mayor de San Andrés, es cuando  les manifestó a sus padres su deseo de continuar con estudios superiores, entonces sus padres decidieron inscribirlo al curso prefacultativo que duró 4 meses aprobando en forma sobresaliente.

A Carlos le gustaba asistir a la Universidad y se sentía muy orgulloso, por el hecho de estar cursando una Carrera en una Institución de Educación Superior de mucho prestigio. Se destacó como estudiante responsable y hasta escribió un artículo científico para la revista KIPUS de su carrera.
Todos sus docentes fueron muy buenos a excepción de uno en el primer año al que le gustaba hacer chistes a costillas de los estudiantes, y justamente con éste tuvo problemas porque nunca avisaba y peor aún, nunca devolvía evaluaciones ni trabajos de investigación y si alguien reclamaba inmediatamente era agredido verbalmente. Este docente era la pesadilla de Carlos, porque sus cambios de humor eran constantes y por eso todos los estudiantes le tenían miedo, no se atrevían a preguntarle nada, porque caso contrario su venganza eran las bajas calificaciones y reprobaciones. Así pues, uno de los que reclamó fue Carlos y debido a ello quedó reprobado en esa materia. Quedó profundamente decepcionado. Pero a pesar de las adversidades que vienen con la vida y de los contratiempos que le puso ese docente, todo ello le sirvió para fortalecerse y no darse por vencido para continuar sus estudios en la carrera que había elegido.

  Durante su formación no se perdió ni una sola clase y sus docentes lo estimaban. De este modo, cuando ya cursaba el tercer año de la carrera, decidió realizar una pasantía en el Museo Nacional de Historia Natural asistiendo todos los días hasta culminar con la carga horaria establecida, se destacó como  GUÍA EDUCADOR y su experiencia fue recogida en una monografía titulada: “El Museo de Historia Natural como un recurso didáctico aplicado al campo educativo”.       

          Al finalizar su pasantía, pensó que sería bueno defender ese trabajo de investigación realizado en ese museo ante un tribunal para obtener el grado de TÉCNICO SUPERIOR, así lo hizo, y para ese efecto nombró a la Lic. Dirzi Gina Miranda como su tutora, al mismo tiempo, el director de la carrera Lic. Germán Choque nombró a su tribunal integrado por la Mg. Sc. Margot Cavero y el Lic. Pedro Choque, un agradecimiento especial a todos estos profesionales por su entrega al servicio de la Educación Superior. 

El día esperado para la defensa  llegó con mucho entusiasmo y pensamientos positivos. Le fue muy bien porque venció con una calificación sobresaliente, con la ayuda de Dios. Al mismo tiempo, en coautoría con su madre decidió escribir un libro en donde recogió sus investigaciones y conocimientos adquiridos a lo largo de su formación, plasmados en artículos científicos realizados en las áreas de Tecnologías de la Información, Bibliotecología, Archivología, Museología, entre otros, denominado INFOVÍA DE LA COMUNICACIÓN.

No contento con estos logros decidió continuar sus estudios hasta egresar en los 5 años establecidos que duró la carrera  hasta lograr su titulación en el año 2016 como LICENCIADO EN BIBLIOTECOLOGÍA Y CIENCIAS DE LA INFORMACIÓN (mención Archivos y Bibliotecas). Por otro lado, escribió en coautoría con su madre su segundo libro fruto de la investigación realizada durante 3 años, denominado PASEANDO POR MI TIERRA BOLIVIA. DIRECTORIO DE INSTITUCIONES CULTURALES, esta obra es una herramienta de información dirigida a los turistas nacionales y extranjeros para que se beneficien con los atractivos y patrimonio cultural y natural que ofrecen estas instituciones con su respectiva aplicación al campo educativo. Por este motivo también se convierte en un aporte a las comunidades educativas tanto de nivel primario, secundario y superior.

Simultáneamente, estudió hasta cuarto año en la Especialidad de Educación Especial e Inclusiva para Personas con Discapacidad en la Escuela Superior de Formación de Maestros “Simón Bolívar” de la ciudad de La Paz, habiéndose desempeñado en su Práctica Docente de forma responsable en los establecimientos que le tocó asistir como ser: Escuela “José Martí”, Escuela “Gran Bretaña”, Centro de Educativo Especial “Adaptación Infantil” y "APRECIA" La Paz. Sin embargo, tuvo que abandonar la Carrera debido a la intransigencia de 3 docentes que querían "Normalizarlo a la fuerza" e inclusive una de ellas se atrevió a decir que NO SERVÍA PARA LA DOCENCIA, lo que es peor, nunca le aplicaron las famosas "Adaptaciones Curriculares" de las cuales tanto habla el Ministerio de Educación, es más, estas 3 personas se pusieron de acuerdo para hacer que abandone la Escuela Superior de Formación de Maestros. Este estrés  le afectó muchísimo  a su salud padeciendo ataques de ansiedad y nerviosismo hasta el día de hoy. Por este motivo, tuvo que abandonar sus estudios por un año (que se convirtieron en 2, esperando a la próxima promoción, para que así pueda cursar estudios junto con ese curso). 
Pasó el tiempo y llegó su último año  con muchos  trámites burocráticos que no se pudieron solucionar desde la Dirección General y Dirección Académica de esa institución de Educación Superior ( se tuvo que acudir a instancias superiores, o sea, hasta el Ministerio de Educación para dar solución a su caso), y después del cambio de autoridades y gracias a una autoridad que se hizo cargo de la Dirección de manera interina, se pudieron solucionar todos sus trámites para que pueda defender su trabajo de investigación y egresar como Licenciado en EDUCACIÓN ESPECIAL en enero de 2018 (Carlos no pudo egresar con sus compañeros de curso en diciembre de 2017 debido a la maldad de las autoridades  que en "hora buena" ya no se encuentran trabajando en esa institución, y que le causaron mil problemas burocráticos en sus trámites para la defensa de su proyecto). Así pues, una vez que se fueron, ingresaron otras, mucho más eficientes y mejor capacitadas que lograron canalizar y finalizar con sus trámites para que pueda defender su proyecto de grado y así obtener su ansiado título. (Por este motivo, un agradecimiento especial a la Lic. María Elena Martínez, es una autoridad muy eficiente, que Dios la bendiga todos los días de su vida, igualmente al tutor de su Proyecto de Grado, Lic. Juan Gutiérrez quien siempre estuvo guiándole y orientándole en la elaboración del mismo). Contrariamente a todo el mal que le ocasionaron 3 docentes y 2 autoridades, salió más fortalecido y todas esas adversidades que sufrió, lograron fortalecer más su espíritu de motivación por salir adelante.

Por otra parte, el año 2016  Carlos  en la ciudad de Cochabamba estudió un posgrado sobre MUSEOLOGÍA Y MUSEOGRAFÍA.
Continuando con sus estudios de posgrado, el año 2017 logró culminar estudios de un diplomado en EDUCACIÓN SUPERIOR BASADA EN COMPETENCIAS en el CEPIES - UMSA de la ciudad de La Paz y actualmente se encuentra realizando una Maestría en GESTIÓN CULTURAL PARA LA DIVERSIDAD dependiente de la Universidad Católica Boliviana, al mismo tiempo, realizó otro diplomado en EDUCACIÓN INCLUSIVA para personas con Discapacidad en la Universidad Mayor de San Simón (UMSS). Asimismo, el año 2018 logró publicar su tercer libro en coautoría con otros, sobre MUSEOS APLICADOS AL CAMPO EDUCATIVO, en donde presenta un diseño de planificación integrada entre MUSEO Y ESCUELA según parámetros establecidos por la actual reforma educativa: OBJETIVOS HOLÍSTICOS (Ser, saber, hacer y decidir), CONTENIDOS Y EJES ARTICULADORES, ORIENTACIONES METODOLÓGICAS Y DINAMIZADORAS, PRODUCTOS O RESULTADOS Y EVALUACIÓN. Una herramienta muy útil para docentes y trabajadores de museos (educadores guías).

Para finalizar, debo decir que con la ayuda de Dios, de la familia y personal profesional muy bien capacitado que les apoyen con sensibilidad y comprensión, estas personas pueden salir adelante y lograr alcanzar sus metas, y si una puerta se cierra, siempre existirán otras que se abran, lo último que se pierde es la esperanza.